Las instituciones educativas están obligadas a cumplir con estrictas obligaciones de protección de datos en procesos de matrícula, especialmente al tratar datos sensibles de menores. 

Así, la información recopilada mediante formularios de matrícula, exámenes, evaluaciones, contratos, entre otros deben cumplir con ciertos requisitos para evitar caer en infracciones y multas que pueden llegar a las 50 IUT(s), precisa un informe legal del Estudio Olaechea. 

De acuerdo con el documento, algunas de las infracciones más recurrentes y multadas por la Autoridad Nacional de Protección de Datos Personales (ANPD) son la falta de consentimiento del titular, que en este caso requiere la aceptación expresa de los padres de familia o tutores, recopilar datos que no sean necesarios (como el uso de imágenes en redes sociales, páginas web o similares), y no brindar una política de privacidad a los padres, entre otras. 

En efecto, como consecuencia del ejercicio de sus actividades, las instituciones educativas realizan diariamente el tratamiento de datos personales de menores de edad, los cuales incluyen datos sensibles de los menores. 

Por tanto, dada la sensibilidad de la información que almacenan las instituciones educativas, la Ley de protección de datos personales y su reglamento han establecido que el tratamiento de datos de menores de edad es considerado como categoría especial de tratamiento. 

¿Cuáles son las obligaciones de las instituciones educativas en los procesos de matrícula? Las instituciones educativas como responsables de tratamiento están obligadas a informar a los padres de familia sobre las condiciones del tratamiento de los datos personales de los menores en sus procesos de matrícula, detalla el informe legal del Estudio Olaechea.

Estos corresponden a contar con políticas de privacidad, sobre los usos de imágenes; determinar todas las finalidades del tratamiento; e inscribir los bancos de datos personales.